Imagen de Rafal OlbinskiA solas y frente al espejo se atreve a quitarse la careta. Presa de sus propios miedos, ensaya un grito que se acobarda en la garganta. Reafirma la sonrisa; el temor gana una y otra vez la partida. Un nuevo cliente se abre con dificultad la bragueta. ¿Tenés 13 nomás? Quién lo diría, con ese cuerpito. Su carita -careta de mujer- sonríe, hasta el dolor sonríe –escondiéndose-, mientras en su interior la niña agita los barrotes intentando infructuosamente escapar.
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1 comentario:
Es un texto corto este, pero tan fuerte que me parece haber leido el quijote en un dia y me ha dejado hinchado sin mas necesidad de leer, pues despues de algo aso, solo queda reflexionar. Chao, otro dia revisare tus otros posteos, y tienes razon, no es casualidad que haya llegado a tu blog, no se como llegue, pero casualidad no a sido. Que estes bien.
Te invito a pasar por mi blog, tengo que aprovechar esta instancia e invitarte.
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