Como el vago y triste eco del resuello
de ese bandoneón abandonado
mi pobre corazón acongojado
derrama sus pesares sin consuelo
Se esconde, se agazapa, se resiste,
se niega rotundo a enamorarse
decide que no volverá a jugarse
entregado a la pena que persiste
Mas todos mis sentidos lo espolean
henchidos, en mi cuerpo de mujer
y llegados a su puerta golpean
para que vuelva el amor a crecer
para que las heridas ya no duelan
buscando ansiosos verme renacer.
de ese bandoneón abandonado
mi pobre corazón acongojado
derrama sus pesares sin consuelo
Se esconde, se agazapa, se resiste,
se niega rotundo a enamorarse
decide que no volverá a jugarse
entregado a la pena que persiste
Mas todos mis sentidos lo espolean
henchidos, en mi cuerpo de mujer
y llegados a su puerta golpean
para que vuelva el amor a crecer
para que las heridas ya no duelan
buscando ansiosos verme renacer.
1 comentario:
Bello soneto. Felicitaciones. Hermoso tu blog.
Desde Córdoba un abrazo.
Alicia
Publicar un comentario